El Observatorio de Salud de la Infancia y la Adolescencia –Fundación FAROS- del Hospital San Joan de Déu ha publicado su sexto cuaderno, titulado ¿Cómo educar las emociones? La inteligencia emocional en la infancia y la adolescencia.

En este informe se presenta un concepto actual de las emociones y expone cómo se ha pasado de la inteligencia emocional a la educación emocional y las aplicaciones que de esto se derivan en la educación formal y en la familia, situando siempre al niño y al adolescente como punto central de interés. Pretende suscitar la curiosidad por el tema y por lo tanto, las ganas de seguir formándose y leyendo sobre la inteligencia emocional. El documento va dirigido a la sociedad en general y de forma especial a las familias y al profesorado.

 

La inteligencia emocional es la habilidad para tomar conciencia de las propias emociones y de las demás personas y la capacidad para regularlas. Según expone Eduard Punset en el interesante prólogo del cuaderno, "afortunadamente estamos descubriendo por fin la prioridad que deberíamos otorgar al aprendizaje emocional. Algo que está constatando la ciencia, es la importancia de la gestión de estas emociones básicas y de su prioridad frente a los contenidos académicos de los más pequeños, como la capacidad de cálculo, la caligrafía,... Aquí, en aprender a manejar las propias emociones –que no reprimirlas, como hemos venido haciendo durante siglos- reside la clave del éxito de los futuros adultos".

En este documento, se pueden encontrar una serie de capítulos que tienen como objetivopresentar un marco general de la inteligencia emocional y los fundamentos para la práctica educativa, tanto en la familia como en la escuela. En la siguiente tabla presentamos un resumen de los contenidos del informe:

Primer capítulo: ¿Qué son las emociones? Francisco Mora habla de emoción, biología y salud para enmarcar el tema. Explica qué son las emociones desde un punto de vista neurofisiológico.

Segundo capítulo: De la Inteligencia emocional a la educación emocional.Redactado por Rafael Bisquerra, describe la inteligencia emocional y los principales modelos, desde donde se pasa a las competencias emocionales y la forma de desarrollarlas a través de la educación emocional.

Tercer capítulo: Educar con inteligencia emocional en la familia. Esther García presenta propuestas prácticas para ayudar a padres y madres a desarrollar la inteligencia emocional en sus hijos. La educación emocional debe empezar desde el nacimiento, y por tanto la familia tiene una función muy importante en este sentido.

Cuarto capítulo: Inteligencia emocional en el aula. Èlia López Cassà, presenta propuestas prácticas para el profesorado.

Quinto capítulo: Revisión del aprendizaje social y emocional en el mundo.Juan Carlos Pérez-González, expone un marco general sobre la inteligencia emocional aplicada a la educación en el mundo.

Sexto capítulo: La experiencia de la educación emocional en las aulas de Nueva York. Linda Lantieri presenta algunos aspectos sobre el aprendizaje social y emocional.

Séptimo capítulo: La educación emocional en el Reino Unido. Pilar Aguilera, habla sobre el aprendizaje social y emocional en los centros educativos, con la intención de poder extraer recursos para la práctica.

Octavo capítulo: Orígenes y desarrollo de la educación emocional en España. Rafael Bisquerra expone una visión de síntesis del aprendizaje social y emocional, de algunos casos llevados a cabo en España.

Noveno capítulo: Programa de aprendizaje social y emocional en los centros SEK. Nieves segovia, hace especial referencia a algunas experiencias concretas con la doble finalidad de dar a conocer y de hacer sugerencias útiles para los lectores.

Décimo capítulo: Las claves de la Inteligencia emocional. Recoge en forma de decálogo de buenas prácticas, una síntesis de los principales consejos que se han ido desarrollando a lo largo de todo el informe.

Entre las claves para una buena Inteligencia Emocional, se destacan la importancia de lacuriosidad como puerta para el aprendizaje, la necesidad de la empatía para una buena inteligencia emocional o la habilidad de reconocimiento y expresión de las emociones y sentimientos. La adquisición de estas habilidades se deben dar cuanto antes y en los ámbitos tanto familiares como escolares.

El documento completo se puede descargar desde la página web de FAROS:http://www.faroshsjd.net/item.php?id=2232&lang=1 o directamente pinchando aquí.