Se conoce como sueño a un estado de reposo uniforme en un organismo. En contraposición con el estado de vigilia, el sueño se caracteriza por los bajos niveles de actividad fisiológica y por una respuesta menor ante estímulos externos.
En este sentido, Aristóteles, en el siglo 4º a.C., decía que “la vida onírica es la manera en que nuestra alma trabaja mientras dormimos.”
Asimismo, William Shakespeare decía en su obra “la Tempestad” que “somos sustancia de la que están hechos los sueños, y nuestra pequeña vida está envuelta de sueños”.
En este contexto, los estudios reflejan, que más o menos nos pasamos una tercera parte de nuestra vida durmiendo, y por extensión, entrando en un universo paralelo lleno de símbolos que no siempre sabemos interpretar.
Pero, ¿Es posible descifrar nuestros sueños? ¿Tienen todos la misma categoría? ¿Cómo y de qué manera debemos interpretar los sueños para que nos sean útiles? ¿Son las pesadillas avisos de desgracias que están por llegar? ¿Qué son las Parasomnias? ¿Cuáles son las causas que provocan el sonambulismo? ¿Cómo se juzgan los delitos cometidos bajo los efectos del sueño.
Para responder a estas y otras cuestiones tenemos con nosotros a Neus Colomer, psicóloga clínica, a Myriam al-Fawal, fiscal de la audiencia provincial, ex juez, master de derecho penal y medioambiental y doctorada en la universidad Internacional de Cataluña, a Pedro Palao Pons, periodista y escritor y a Bernat Tiffón, Psicólogo jurídico y forense, y Profesor de Psicología Criminal de la Universidad Internacional de Cataluña.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario