Lo masculino y lo femenino son aspectos complementarios. Creer en la mentira de la igualdad de sexos, solo trae problemas porque no somos ni queremos ser iguales.
Cuando el equilibrio se rompe, el hombre deja de ser masculino o la mujer deja de ser femenina... se crea el conflicto, las dificultades...
Nadie lo dice abiertamente, se encubre bajo pretextos, mentiras... autoengaños. La mente siempre sabe justificar lo que necesita bajo un aspecto muy respetable.
El feminismo radical ha confundido a muchas mujeres y a algunos hombres...
La mujer o el hombre que no se comporta de manera ajustada a su feminidad o masculinidad, deja un hueco que va a permitir que sucedan situaciones no deseadas.
Juan Carlos Medina
Psicólogo
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