domingo, 29 de diciembre de 2013

Las diez señales de la mujer cuando le gusta un hombre

Sepa cómo es su mirada, su sonrisa, su movimiento de piernas, sus gestos... Le ayudará a conquistarla

Las diez señales de la mujer cuando le gusta un hombre
FOTOLIA
Cuando a una mujer le atrae un hombre juega con el cabello
Sabemos que no sólo hablan las palabras, también nuestros gestos, miradas, expresiones en el rostro... dicen mucho de cada persona, de su estado de ánimo, emocional... Ahora un estudio realizado por investigadores de instituciones de la Universidad de Lancaster y elImperial College de Londres ha desvelado las señales de la mujer cuando tiene cerca a ese hombre especial, ese compañero que le atrae y le gusta. En el estudio también ha participado Paul Ekman, nombrado por la Asociación Americana de Psicología como uno de los psicólogos más influyentes del siglo XX y una de las cien personas más influyentes del mundo según la revista «Time».
Un resumen de este estudio se publica en la web lenguajecorporal.org,ofreciendo además consejos a los hombres para que conozcan cómo deben actuar en cuanto detecten alguno de estos signos. He aquí la lista de los diez signos de una mujer cuando le gusta un hombre:
1. El buen humor es espontáneo: sonrisa pícara, natural, risilla nerviosa... Una mujer se ríe abiertamente cuando disfruta de la compañía, se siente feliz y agradada. Para que siga sintiéndose cómoda, el hombre no debe tener prisa.
2. Le toca «sin querer»: cuando una mujer intenta aproximarse al hombre que le gusta le toca accidentalmente: le roza el brazo, la camisa o incluso la pierna... Los hombres no deben desaprovechar este momento, pero traten de diferenciar los toques accidentales de los intencionados.
3. Hay demasiadas coincidencias: se producen tantas coincidencias que parece que la mujer lee la mente del hombre y adivina lo que va a hacer. Hay muchos encuentros que parecen fortuitos.
4. Lanza miradas intermitentes: los investigadores aconsejan a los hombres que aprendan a mirar a las mujeres dirctamente. Ellas pueden analizar y descartar a un hombre solo con un vistazo.
5. Juega con el cabello: aunque las mujeres suelen estar siempre acomodándose el cabello, hay veces que sólo lo hacen para atraer a los hombres, es un gesto más premeditado, un movimiento más minucioso de lo normal, manteniendo el contacto visual.
6. Cruzan las piernas: la mujer pone la pierna más alejada del hombre por encima de la otra pierna para mostrar la pantorrilla. En esta posición, los músculos de la pierna se ven más tersos y provocativos.
7. Dirige la barbilla y la cara hacia el hombre: La mujer gira ligeramente la barbilla hacia el hombre. Es un gesto que desvela que le interesa lo que dice su compañero. A las mujeres les gusta hablar de frente.
8. Los pies están un poco separados: cuando la mujer está de pie, el dinamismo con el que mantiene el equilibrio nos dice la emoción que siente. Si ambas piernas están derechas e inexpresivas, no hay pasión. Si están ligeramente abiertas o jugando con los tobillos, está nerviosa.
9. Recuerda detalles de conversaciones anteriores: una mujer, por distraida que sea, no olvida los pequeños detalles que dice un hombre cuando este le interesa. Puede ser que el hombre los haya olvidado, pero ella no. Fíjese en esos detalles.
10. No se siente intimidada por la proximidad del hombre: si de verdad le gusta el hombre, no le importa que se acerque a ella, pero debe ser en el momento oportuno, sin prisas. ¿Cómo saberlo? Una manera sencilla de acercarse a una mujer sin amenazar su espacio es dirigir su atención lejos del hombre: busque algo que puede llamar la atención (otra pareja, una escultura...), apúntelo con la mirada, mientras se acerca a ella. Si hace un gesto hacia atrás es mala señal.
FUENTE: abc.es




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jueves, 26 de diciembre de 2013

“Masajes con final feliz”, legales en China

“Masajes con final feliz”, legales en China
Los chinos siempre se encuentra tratando de innovar y en este caso no es la excepción, resulta que ahora ya aprobaron la ley para legalizar los masajes con final feliz.
La mayoría de los hombres sueña con tener un masaje con final feliz, según para quitarse un poco de stress ¡Ahí, sí, ajá!, pero como sabemos en algunos lugares es algo que resulta ilegal, pero no imposible de realizar.
Los chinos siempre se encuentra tratando de innovar y en este caso no es la excepción, resulta que ahora ya aprobaron la ley para legalizar esos masajes.
Una corte en la ciudad de Foshan, en la provincia de Guangdong, determinó que masturbar a otra persona a cambio de dinero no es ilegal, y por lo tanto, dichos actos no deben ser castigados por la justicia. Así, quienes busquen ese tipo de masajes, ya podrán hacerlo “con todas las de la ley”. Esta iniciativa fue aprobada por una corte intermedia popular desde el año pasado.
Esto es algo innovador en China, pues la prostitución en aquel país fue prohibida por el Partido Comunista en 1949 y desde entonces es considerado como ilegal. Ahora, con esta determinación de la Corte de Foshan, ni la masturbación, ni el masaje con senos están consideradas como un acto sexual, y por lo tanto, tampoco como prostitución.
Si en tus planes de vacacionales esta quitarte el estrés en un bello lugar, no olvides visitar Guangdong, donde te dejaran más que feliz.


FUENTE:







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sábado, 21 de diciembre de 2013

No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy (La temible procrastinación)

Pilas de trabajos que se nos van acumulando mientras perdemos el tiempo navegando sin rumbo en Internet, Cursos de idiomas que hemos pagado y que están allí esperando a que nos decidamos a comenzar; dietas que dejamos para “mañana”, actividades de todo tipo que postergamos… ¿Seremos capaces alguna vez de no dejar para mañana lo que podemos hacer hoy?
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¿Qué es la procrastinación?
Hemos oído hablar de la evitación de hacer una tarea que “hay que hacer”  o de posponer para mañana lo que se puede hacer hoy.  La dilación no solo afecta el trabajo de una persona, sino también comúnmente involucra sentimientos de culpa, incapacidad, disgusto, estrés y en ocasiones depresión.  Muchas veces intentamos ocultar nuestra evasiva por estar ocupado haciendo cosas que pueden ser interesantes, e incluso útiles, pero que no contribuyen  a la meta principal.
Recordemos que cuando las sensaciones inmediatas de la vista, el olfato, el oído y el tacto excitan nuestro cerebro (sistema límbico), abunda más nuestro comportamiento impulsivo y el “ahora mismo”  nos domina. Se dejan de lado las metas futuras que ocupan  la corteza pre frontal y definitivamente nos vemos seducidos por las diversiones: aunque sabemos lo que deberíamos hacer, no queremos hacerlo, sencillamente, nos atrae más la estimulación inmediata, nos distraemos pro el camino. O dicho de otra forma: el sistema límbico se ejecuta de manera automática  a un ritmo vertiginoso y, por lo tanto, a la conciencia le cuesta trabajo procesarlo: con mucha frecuencia los deseos nos llegan de manera incontrolable.
Cómo sabemos, la impulsividad se relaciona con vivir el momento de manera perentoria. Los deseos y proyectos a largo plazo (por ejemplo los típicos propósitos de cambio de cada fin de año) y las fechas de compromisos futuros (entrega de trabajos, reserva de pasajes de viaje, confirmaciones de citas médicas) se ignoran mientras no sean inminentes, hasta que ese lejano futuro se nos convierte en la presión del “ya”. Por desgracia nuestra motivación no coincide con los plazos.
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Procrastinar no trata solamente de dejar algo para más adelante, aunque proceder de esta forma es parte integral de este mecanismo. La palabra procrastinación proviene del latín proque significa “delante de, a favor de”, y crastinus, que significa “del día de mañana” . El significado de esta extraña palabra abarca muchísimo más que su definición literal. Ojo, que la prudencia, la paciencia y el dar prioridad pueden hacer que se posponga algo para más adelante, pero esto no tiene que ver nada con procrastinación. Para hablar de procrastinación es necesario posponer algo, pero de manera irracional; es decir: cuando posponemos tareas o proyectos de manera voluntaria pese a que nosotros mismos sabemos que esa demora nos perjudicará o nos pondrá a correr a última hora para no quedar mal con aquello con lo que nos comprometimos.
Cada vez que procrastinamos, somos conscientes de que estamos actuando en contra de lo que nos conviene.  Quien procrastina suele postergar en forma sistemática aquellas tareas cruciales para la vida diaria que debe realizar  y las reemplaza por otras actividades más irrelevantes y placenteras  de llevar a cabo. Es asumida popularmente como “vagancia” , “pereza”, “ociosidad” “haraganería” o “fiaca”. La procrastinación tiene que ver con todas esas metas que nos pusimos pero dejamos pasar porque nunca encontrábamos la motivación suficiente para dedicarnos seriamente a conseguirlas; tiene que ver con la dieta aplazada indefinidamente, los trasnochos y prisas de última hora para entregar un proyecto con el que nos habíamos comprometido mucho tiempo atrás. También se relaciona con el desorden que se acumula en nuestro escritorio y esos archivos que esperan ser clasificados, mientras nos dedicamos a ver todas las temporadas de nuestras series favoritas de la tele o a revisar las páginas de nuestras redes sociales. La procrastinación trata de todos los días que pasan sin que hayamos hecho nada de lo que deberíamos hacer, de los retrasos, las excusas, de las oportunidades perdidas  y, a la postre, de nuestra frustración y sentimientos de haber malgastado las oportunidades.
En la procrastinación hay una pésima gestión del tiempo. En general, el  individuo que procrastina suele “sobreestimar” el tiempo que le queda para realizar una tarea importante para su desarrollo o bien “subestimar” el tiempo que requiere –según sus propios recursos- para desarrollar la tarea.  Muchas personas que procrastinan  se auto engañan  y  exhiben una falsa sensación de autocontrol y autoconfianza. Por ejemplo,  hagamos de cuenta que se nos dan tres semanas para presentar un ensayo. En nuestro interior estamos seguros de que solo necesitaremos un fin de semana para hacerlo, e incluso menos tiempo. En el momento en que nos presentan el reto  nos decimos “tengo tiempo de sobra, no es necesario que comience ahora con el trabajo·”  Así que se posterga día tras día una tarea que en principio no nos ilusiona realizar y que, en cierta forma, “ya hemos dado por hecha” en nuestra mente cuando ni siquiera hemos comenzado a realizarla. No obstante, para nuestro pesar, el tiempo pasa  y se acerca el plazo de entrega del ensayo. De repente, nos damos cuenta que no seremos capaces de cumplir cabalmente con el trabajo que se nos ha asignado. Entonces nos angustiamos y vemos que la situación no está bajo nuestro control, y comenzamos a trabajar en ello en forma acelerada y con una inmensa carga de estrés.  En ocasiones se logra desarrollar el trabajo a última hora, a punta de trasnochos y bajo una inmensa presión, o… tenemos que recurrir al viejo truco de inventar la pérdida de toda la información debido a un extraño virus informático o buscamos desesperadamente una incapacidad médica por una falsa jaqueca y pedimos un aplazamiento para presentar el trabajo encomendado. Podríamos decir que: tapamos con el codo, lo que no hicimos con la mano
Nuestra tendencia a posponer las cosas tardó cien millones de años en formarse y ahora está casi impresa en nuestro ADN. Pero las investigaciones enseñan que, pese a su arraigada naturaleza, podemos modificar nuestros hábitos y cambiar esta perniciosa conducta. Si nos lo proponemos, seremos capaces dar paso a la acción y transitar con seguridad hacía una claridad y atención cristalina que a la postre  nos llevará a realizar esas tareas que valen la pena, sin dilaciones o excusas absurdas. Es posible acometer nuestras obligaciones sin vacilación y desarrollar al máximo nuestro potencial, aprovechando el tiempo para nuestro crecimiento personal  y disfrutar de ratos de esparcimiento con la sensación de nuestro deber cumplido.

¿Qué cosas hacen que procrastinemos? 
Las causas pueden ser muchas y variadas, pero señalaré aquílas más comunes de acuerdo mi experiencia clínica:
  • Una deplorable gestión del tiempo, muchas veces asociada con un sentido distorsionado (autoengaño) del tiempo que tenemos disponible.
  • La incapacidad para priorizar.
  • Ser impulsivos, lo que implica, poca meticulosidad, bajo autocontrol y gran propensión a la distracción
  • Una tendencia a ver las metas y preocupaciones de mañana de modo abstracto, es decir, en líneas generales e indefinidas, mientras que, en cambio, se ven las metas y preocupaciones inmediatas de hoy de modo concreto, es decir, con mucho detalle en lo que se refiere al quién, al cómo, al dónde y al cuándo. En otras palabras, la causa tiene que ver con no saber proyectarnos en el tiempo de manera precisa.
  • Los plazos largos. Cuanto más lejos en el futuro esté la fecha de terminación de cualquier tarea, tanto mayor será la variable de demora y la motivación para realizar el trabajo se irá esfumando.
  • Sobrecargarse de tareas a una hora específica y sin medir las consecuencias. Lo anterior se relaciona muchas veces con problemas de asertividad y la incapacidad de decir “no”, cuando uno no quiere o no tiene tiempo.
  • Sentirse abrumado(a)  por la tarea. Así que, la persona  consume  más tiempo en preocuparse en lugar de  ponerse a trabajar en el desarrollo del trabajo.
  • Dificultades para mantener la atención en la tarea asignada y tener problemas para concentrarse.
  • No saber con exactitud en qué consiste el trabajo y los requisitos necesarios para realizarlo (p.ej., no leer las instrucciones a tiempo, ni en detalle)
  • Perfeccionismo, a menudo asociado con estándares poco realistas.
  • Sentimientos negativos—por ejemplo, “Soy estúpido”, “Soy mediocre”, “Mis trabajos son de baja calidad”. Tenerse poca autoeficacia o confianza en sí mismo, sobre todo en lo que se refiere a las tareas que se propone.
  • Dificultades marcadas para aplazar las oportunidades placenteras que aparecen de repente (que brindan refuerzo inmediato).
  • Un pensamiento dicotómico del “todo” o “nada”, dónde un resultado poco acorde con las expectativas del individuo puede ser visto como una catástrofe.
  • Considerar que el trabajo es aburrido, y no sentir motivación alguna para realizar la tarea, una “odiosa obligación”.
  • Incapacidad de postergar los reforzadores
  • La modernización, la tecnología y el mercadeo traen consigo la procrastinación ya que una cantidad de elementos globalizadores y vanguardistas (p. ej. televisión, video consolas, los teléfonos inteligentes, redes sociales) se convierten con frecuencia en elementos claves para distraernos y alejarnos de nuestras metas.
La procrastinación es vista por algunos autores como una miopía emocional que solo es capaz de ver el presente. Dejar ilógicamente las cosas para más adelante en el tiempo es una tendencia, no se trata de una cosa inevitable. Si aprendemos a gestionar nuestro tiempo, priorizamos con acierto, mejoramos nuestras habilidades para organizarnos, reconocemos la importancia de desarrollar hábitos saludables, exploramos dentro de nosotros las causas últimas de nuestra procrastinación (aceptando nuestro estado interior) y fomentamos nuestras motivaciones intrínsecas, conseguiremos además de alcanzar un mayor número de metas, muchas satisfacciones y la tranquilidad que nos brinda el deber cumplido a tiempo y a consciencia.
Autor: Doctora Iris Luna
Fuente consultada: Piers Steel; 2011; The procastination Equation: The Science of Getting Things Done.



FUENTE:
http://elartedesabervivir.com/la-temible-procrastinacion/



10 HABITOS DE LAS PAREJAS FELICES, SEGÚN ESPECIALISTAS



“¿Qué se necesita para ser feliz en una relación?” es la pregunta que plantea el doctor Mark Goulston, psiquiatra, consultor empresarial, y conferencista internacional, quien propone algunos consejos para mejorar la vida en pareja.
Si bien no existe un secreto mágico para lograrlo, Goulston plantea que su experiencia le ha hecho notar que las parejas más felices suelen tener ciertos hábitos que contribuyen a su bienestar.
1. Van a la cama al mismo tiempo
Según Goulston, las parejas felices suelen resistir a la tentación de ir a acostarse en diferentes momentos. “Van a la cama al mismo tiempo, incluso si uno de los dos se levanta luego para hacer cosas mientras su pareja duerme”, dice, añadiendo que “cuando tocan su piel aún sienten un pequeño hormigueo, a menos que uno o ambos estén tan agotados como para sentirse sexualmente excitados”.
2. Cultivan intereses comunes
Cuando la pasión baja sus niveles, es común que las parejas se den cuenta que tienen pocos intereses en común. Por ello, no hay que restarle importancia a las actividades que pueden desarrollar y disfrutar en conjunto, dice el experto.
“Si los intereses comunes no están presentes, las parejas felices los desarrollan”, señala, recomendando también tener actividades por separado, para que la relación no se vuelva demasiado dependiente.
3. Caminan de la mano o van uno al lado del otro
En lugar de que uno de los dos se vaya quedando atrás porque camina más lento o se detiene a ver algo, Goulston recomienda andar cómodamente al lado de la pareja, y mejor aún si se toman la mano. Si uno quiere parar a observar alguna cosa, es mejor hacerlo juntos, o se pierde el sentido de compañía.
4. Confían y perdonan
En los desacuerdos o discusiones rutinarias que no llegan a resolución, las parejas felices no se desgastan, se perdonan mutuamente y confían el uno en el otro, en lugar de guardar rencor y mantenerse de mala gana en la relación.
5. Se centran más en lo que su pareja hace bien que en lo que hace mal
Si comienzas a buscar cosas malas en tu pareja, siempre encontrarás algo. Si haces lo contrario, es decir, buscas lo bueno, también hallarás cosas. “Todo depende de lo que quieres buscar. Las parejas felices acentúan lo positivo”, dice el experto.
6. Se abrazan al reencontrarse después del trabajo o actividades
“Nuestra piel tiene una memoria de “buenas caricias” (amor), “malas caricias” (abuso) y “sin caricias” (descuido). Las parejas que se saludan con un abrazo mantienen su piel bañada por “buenas caricias”, afirma Mark.
7. Dicen “te amo” y “que tengas un buen día” todas las mañanas
Es una manera de cultivar la paciencia y la tolerancia, pues es una buena forma de empezar un día que depara problemas, dificultades y otras molestias que podrían darse en el trabajo.
8. Dicen “Buenas noches” cada noche, independientemente de cómo se sientan
“Esto le dice a tu pareja que, sin importar lo mal que estás con él o ella, aún quieres estar en la relación. Dice que lo que tú y tu pareja tienen es más grande que cualquier incidente perturbador”, explica el psiquiatra.
9. Llaman o envían un pequeño mensaje a su pareja durante el día
Llamar o enviar un pequeño mensaje preguntando como va el día del otro, es un hábito de las parejas felices, dice Goulston. Ayuda a mantener la complicidad y conexión aún cuando no se ven, y permite estar más en sintonía cuando se ven después del trabajo. Puedes saber si tu pareja está teniendo un día horrible o tuvo un gran logro que pueden compartir cuando se reencuentren.
10. Se sienten orgullosos de estar con su pareja
A las parejas felices les gustan verse juntos y cuando están en público suelen darse la mano, apoyar su mano sobre el hombro, espalda o rodilla del otro, etc. Muestran la conexión que existe entre ellos, a veces sin darse cuenta.
Goulston indica que un hábito es un comportamiento discreto que para transformarse en automático, necesita un poco esfuerzo para mantenerlo y cultivarlo. En este sentido, dice que aquellos que tienen problemas de pareja, pueden seleccionar uno de los puntos señalados y llevarlo a cabo. Además, si en un comienzo no funciona, aconseja no desesperarse y simplemente retomarlo.

FUENTE: biobiochile











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miércoles, 18 de diciembre de 2013

'Enganchados al sexo'. El programa de 'Conexión Samanta'


Conexión Samanta” nos invita a conocer cómo la necesidad de sexo puede acabar en un serio problema. El reportaje recopila los testimonios de varios adictos al sexo en sus diferentes versiones: consumidores de pornografía, de prostitución, personas que necesitan practicarlo de forma compulsiva y buscar alicientes fuera de la pareja ya sea cambiando asiduamente de compañero sexual o realizando cada vez prácticas más extremas.


'Enganchados al sexo'















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Las nuevas Televisiones NOS ESPIAN!!

Las nuevas Televisiones NOS ESPIAN!!

Las nuevas Televisiones NOS ESPIAN!!

¿En qué otro lugar puedes sentirte más seguro que en su propia casa? Pero hoy hasta en nuestra cama podemos estar bajo el control del ‘ojo omnipresente’. Y el culpable es un dispositivo que se encuentra en casi todos los hogares: el televisor.
Puede sonar más como el argumento de una película de ciencia ficción futurista, pero estas escenas ya suceden todos los días en pueblos y ciudades de todo el mundo y en la mayoría de los casos, las víctimas no tienen ni idea de que alguien puede estar observando qué ropa llevan puesta, qué alimentos han comido, qué programa de TV han visto y cada paso que dan. Estos ‘vigilantes’ pueden ser delincuentes o trabajar para grandes corporaciones y ahora saben sus secretos más íntimos. En pocas palabras,nuestros televisores han comenzado a espiarnos y esto es algo que está comprobado.
La semana pasada un consultor de tecnologías de la información, Jason Huntley, residente en un pueblo cerca de la ciudad de Hull, en el condado ceremonial de Yorkshire del Este, Reino Unido, descubrió que su televisión inteligente de pantalla plana, colocado en su sala de estar desde este verano, estaba invadiendo la privacidad de su familia, informa ‘The Daily Mail‘. Huntley comenzó a investigar el dispositivo de marca LG que le costó 400 libras esterlinas (unos 649 dólares) después de darse cuenta de que su pantalla de inicio estaba mostrándole anuncios basados en los programas que él había estado viendo. Fue entonces cuando el británico decidió controlar la información que el televisor inteligente que se conecta a Internet estaba enviando y recibiendo. Lo hizo mediante el uso de una computadora portátil como puente entre su televisor y el receptor de Internet, por lo que el portátil era capaz de mostrar todos los datos que eran obtenidos por el ‘dispositivo espía’. Pronto el informático descubrió que no solo todos los detalles de cada programa que estaba viendo, sino también sobre cada botón que pulsaba en su mando, estaban siendo enviados de nuevo a la sede corporativa de LG en Corea del Sur. Allí, la empresa de electrónica parecía estar utilizando los datos personales de sus clientes para ganar más dinero, enviando videos promocionales de productos que potencialmente podrían parecerles interesantes. El LG de Huntley había enviado a la sede de la compañía también el contenido de su colección privada de vídeos digitales que estaba viendo en el televisor, incluyendo filmaciones de celebraciones familiares que contenían imágenes de su esposa y sus dos hijos pequeños.
Pero lo más preocupante de toda la situación fue que el dispositivo continuó el envío de dicha información a Corea, incluso después de que Huntley ajustara la configuración predeterminada paradesactivar el intercambio de datos. El británico escribió acerca de su experiencia en su blog, después de que el caso llamase la atención de los principales medios de prensa del país, lo que obligó al gigante LG a abrir una investigación. “La privacidad del cliente es una prioridad“, afirmaron los representantes de la compañía. “Estamos investigando informes de que cierta información de visualización en televisores inteligentes LG era compartida sin su consentimiento“, añadieron. No obstante, expertos en informática destacan que la investigación de Huntley probablemente es solo la punta del iceberg. Según ellos, los nuevos televisores inteligentes que se conectan a Internet cada día entran en más hogares por todo el mundo y cada uno de ellos puede ser fácilmente ‘hackeado’, ya que a diferencia de las computadoras, es imposible instalarle un antivirus por la falta del ‘software’ necesario. Así, por ejemplo, un delincuente que tiene unos mínimos conocimientos de informática podría obtener los detalles de las tarjetas de crédito que los usuarios suben al televisor para realizar el pago de las películas que descargan o el uso de aplicaciones comerciales.
Otro descubrimiento inquietante que recientemente hicieron los expertos fue que es posible acceder de forma remota a las cámaras de vídeo integradas en miles de televisores inteligentes  y recibir las imágenes de cada paso que dan los usuarios en su propia casa, siempre que estén al alcance del objetivo de ese dispositivo.
Visto en Despertares
Enviado por Juanjo H.
Fuentes: ‘The Daily Mail‘, entrandoenlamadrigueraactualidadrt

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