10 trucos de comunicación que no te enseñaron en la escuela
Ahora puedes ver 10 "trucos de comunicación" que se leen en menos de 5 minutos para que te conviertas inmediatamente en un comunicador más eficaz. Estos "trucos de comunicación" los aprendí de mis errores en mis relaciones con los demás.
"Existe la comunicación perfecta. Y es una lucha". Stefano Benni
¿Tan importante es la comunicación? Es una necesidad básica, sin comunicación no sabríamos cómo relacionarnos con los demás. Hoy en día se ha convertido casi en una obsesión, todos tratamos de comunicarnos de alguna forma, ya sea por correo electrónico o por llamadas de teléfonos celulares que ahora son ubicuos en manos de muchas personas siempre listas para escribir algo en su sistema de mensajería.
A menudo, cuando hablo con la gente, una de las cosas que escucho con mayor frecuencia es que les gustaría mejorar su comunicación con su esposo, hijos, novia, con los amigos, en fin con alguien importante. A casi todo el mundo le gustaría comunicarse mejor, pero muy pocos realmente saben cómo comunicarse con eficacia. En teoría, saber comunicarse es muy diferente a saber cómo hacerlo con eficacia.
No sé si te habrá pasado en tu vida... pero algunas relaciones se han roto debido a mis errores, a veces triviales, que había hecho mientras me comuniqué con alguien. Ahora puedes ver 10 "trucos de comunicación" que se leen en menos de 5 minutos para que te conviertas inmediatamente en un comunicador más eficaz. Estos "trucos de comunicación" los aprendí de mis errores en mis relaciones con los demás.
1/ En primer lugar trata de entender y comprender a la otra persona, en lugar de querer que ella nos entienda primero. En el momento en que el otro se siente comprendido, a continuación, trataremos de entendernos.
Por lo tanto, si quieres entender lo que el otro está diciendo, estás asumiendo que él tiene razón y le pides que te ayude a ver las cosas desde su perspectiva. Haz un esfuerzo para escuchar realmente al otro cuando habla contigo. En lugar de pensar qué vas decirle un poco después; si puedes escucha.
2/ Lo ideal es escuchar el 80% de las veces y sólo hablar el 20% restante.
"Pero yo quiero ser el centro de atención, hablar, ser escuchado y ¿ahora me dices que por primera vez escuche?"
Inténtalo durante una semana y ver qué pasa... te sorprenderás, ¡te lo garantizo!
3/ ¡Nunca interrumpas al orador dando tu opinión! Deja de interrumpirle al otro cuando habla y después de que termine de hablar, antes de abrir tu boca deja un minuto de silencio para darle la posibilidad de añadir cualquier otra cosa. Deja un espacio a los demás.
¿Sabes lo que a menudo me doy cuenta cuando veo a otras personas hablando? Que no hacen más que interrumpirse unos a otros. Ten en cuenta que si no escuchas al otro y no puedes esperar a que te dé su opinión. Cuando estamos en una discusión no nos damos cuenta, pero visto desde el exterior es una situación triste, es como una danza que en lugar de ser armónica, está constantemente rompiéndose. A esto le llamo un diálogo de sordos. Dos personas sordas se gritan una a otra sin molestarse en escuchar al otro. Si empiezas a notar esta dinámica te sorprenderás al descubrir que se produce tanto entre personas que se conocen desde hace mucho tiempo como con personas que se acaban de conocer.
4/ Evita anticipar las palabras que otros van a decir, incluso si piensas que lo sabes. Una vez más, esta es una manera de no interrumpir a la otra persona. La costumbre de anticipar, incluso si crees que ayudas a la otra persona para buscar una palabra, en realidad le estás diciendo que no es lo suficientemente inteligente como para ser capaz de hacerlo solo.
5/ Evite completar los discursos de la otra parte. Esto es la consecuencia natural del punto anterior. La mayoría de las veces en las que me encontré con los discursos completos de otra persona pensaba que él sabía de lo que iba a decirme, pero ¿adivinas una cosa? ¡Yo estaba equivocado! Espero que tú no cometas el mismo error que yo, y dejes que el otro hable. De esta manera, sentirán que no les invades su espacio.
6/ Evita dar explicaciones no son necesarios. Es una costumbre desconcertante porque el otro puede no estar realmente interesado en saber nada de lo que le cuentas, y parece que se hace la víctima.
7/ Deja de actuar como si el otro fuera un idiota sólo porque no compartes la forma en que siente, piensa o razona. Su punto de vista a menudo es diferente del nuestro y nos puede enriquecer. Y tal vez esto nos hace descubrir que la otra persona es mucho más inteligente de lo que pensábamos. La comunicación es efectiva sólo cuando ambas personas tienen interés en estar vivos y activos, en contacto y prestando atención a los demás.
8/ Evita seguir hablando porque no has terminado de decir todo lo que tienes en mente para decir. A menudo, el orador continúa haciéndolo aún cuando la persona que está escuchando ¡ya no está en contacto con quién está hablando! No hay nada más inútil.
9/ Evita palabras que tienen connotaciones negativas. En vez de decir "te robo un minuto", o "¿Te puedo molestar por un momento?", procura, más bien preguntar: "Hola, ¿cómo estás? Es un buen momento para... ". Términos tales como "robo" y "preocupante" que se usan tanto en la comunicación oral y escrita, en realidad no son muy útiles. ¿Quién roba algo realmente?
10. Utiliza la escucha activa. La escucha activa no es simplemente escuchar lo que la otra persona está diciendo y participar activamente en el diálogo, es escucharla con atención. En primer lugar, la escucha activa es sentir las emociones de la gente detrás de sus palabras.
Para captar las emociones de los demás, hay que ponerse en contacto con sus sentimientos. ¿Qué es lo que sientes por dentro cuando el otro está hablando? ¿Qué sientes que el otro puede escuchar cuando hablas? Si estás entrenado para reconocer cada vez más estas emociones, trata por ejemplo de parar y dar un nombre a las emociones que sientes durante el día. Esto te ayudará a reconocerlas en los demás.
En conclusión, te invito a tratar de aplicar uno de estos trucos a la semana, mientras dura esa semana. Entra en el juego, es una buena oportunidad para experimentar y hacer algo diferente. Si notas mejorías, sigue utilizando esa regla, si no observas ningún cambio positivo... déjala en paz. Comienza ahora, en cuanto acabes de leer este artículo, en la primera oportunidad que tengas de interactuar con alguien, trata de aplicar la regla número 1. Y así sucesivamente…
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