Esta semana nos subimos a la furgoneta de una asociación catalana, Ambit Prevenció, para asistir a las mujeres trabajadoras del sexo que ejercen en la carretera. Son mujeres españolas y extranjeras, de todas las edades y con perfiles muy distintos. Pero, desde hace ya muchos años, las mujeres que ejercen se concentran en una autovía y en las carreteras secundarias de una misma zona.Son puntos calientes que ahora también se identifican con unos carteles anunciando de las multas por ejercer o consumir sexo a cambio de dinero. Debajo están las sillas y las chicas esperando a sus clientes.Cada una tiene una historia y una doble vida pero todas están por dinero y muchas coinciden en que si pudieran, no estaría ejerciendo. Otras, sin embargo,han venido desde sus países de origen del este de Europa, la mayoría, para ahorrar y volver a casa dentro de unos años. Pero son conscientes del riesgo que corren porque 'aquí no te puedes fiar de nadie, ni de los clientes'. Han vivido historias duras, para no dormir, pero les sigue compensando seguir a pie de carretera. Vamos a hablar con ellas y a conocer por qué viven de su cuerpo y los riesgos que corren a diario.
Web Ong
http://www.fambitprevencio.org/index.php
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