La actual civilización humana y especialmente occidente ha llegado a cotas de progreso tecnológico y científico imposible de imaginar por generaciones precedentes. Si los antiguos levantaran la cabeza, como se suele decir, se maravillarían o enloquecerían por cosas que nosotros vemos y asumimos normales o naturales.
Una simple radio, una caja donde se oyen voces y música, y que nos permite estar al dia de la actualidad informativa si lo pensamos bien es magia...
Los avances en todos los campos han sido espectaculares y suponen el establecimiento de un nivel de vida y comodidad, inimaginables hace tan solo un siglo.
La naturalización de todos estos progresos, por primera vez mi abuelo compro una radio, mi padre una televisión y yo un ordenador... hace olvidar que antes no lo teniamos y que no aparecieron por generación espontánea, sino que fueron el fruto de una investigación mundial de muchos siglos, que poco a poco fue acumulándose (a hombros de gigantes decía Newton que él estaba).
En este contexto, es donde en la actualidad los hijos del progreso, los chicos acostumbrados a todas las comodidades, a tener un hospital con todo tipo de avances y a usar internet y las nuevas tecnologías, atacan y critican la experimentación animal como si los avances producidos hubieran sido gratis.
La vida de los animales tiene valor (tanto la de una bacteria, una cucaracha, una rata, un perro o un mono... ) todas son iguales a nosotros mismos, en cuanto vida, todos emparentados con origen común pero nunca en la historia cuando se tenia que cazar alguien tenia problemas de conciencia, tal cual hoy se produce en Africa del Sur con aborigenes que persiguen a sus piezas durante horas para cansarlas y poder abartirlas para poder alimentarse.
Si tenemos hospitales con todos sus avances en medicamentos, en diagnosticos, en operaciones... es gracias a la experimentación animal.
Si a una rata se le parte la medula espinal para despues volverse a regener la lesión gracias a células nerviosas de su bulbo olfatorio, no es por sadismo, por disfrutar haciendo daño sino para salvar la movilidad de niños, de personas con este tipo de patologia.
Quien se oponga a la experimentación animal simplemente hace un ejercicio de hipocresía porque todos usamos los hospitales y las instalaciones sanitarias y estas han sido y son solo posibles gracias al sacrificio que animales de laboratorio han producido y producen para el avance científico en todas las areas, neurociencia, enfermedades, discapacidades... etc...
Los animales no son personas. El valor de la vida de un niño, no es el valor de la vida de un perro. La sensibilidad enfermiza de algunas personas impide ver y distinguir que el daño que se le pueda hacer a los animales en favor de la ciencia es un beneficio impagable a humanos, a todos los humanos, presentes y futuros, porque todos podemos vernos en situación vulnerable de discapacidad o enfermedad en cualquier momento.
Juan Carlos Medina
Psicologo
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Hace años trabajé en un centro de menores y uno de los vigilantes de seguridad nuevo nos comentaba que al verlos detras de la alambrada del patio pues le dio pena por ellos.
ResponderEliminarAl trabajar y ver que realmente eran criminales y no estaban encerrados por robar sino por acuchillar y matar, claro dejó de darles pena.
Encerrar a un joven es un mal necesario... Experimentar antes en animales, probar operaciones, farmacos etc... de la misma manera es necesario para ayudar a las personas en sus enfermedades y discapacidades.
Duele la actitud hipocrita de quien se sirve de la medicina, come carne y se permite hablar de la maldad de los cientificos.
Esta entrada es antigua, he caido en ella por casualidad y recordado una cosa.
ResponderEliminarHoy en dia es algo no relativamente corriente pero si se hace cuando se dan las condiciones necesarias, el autoingerto de miembros y mas aun, injerto de miembros en general. Hasta algun injerto de cara se ha realizado, es una cirujia que aun tiene que progresar mucho pero en el mundo existen personas que tienen brazos y piernas gracias a ese tipo de cirujia y a los cirujanos, si no serian grandes amputados.
Vaya mi pequeño homenaje a los animales que han echo posible eso, y en particular a Eclipse, perro Alaska Malamute, que formaba parte de un estudio sobre autoinjertos y que se dejo como testigo. Ese animal estaba alla por los años 80 del siglo XX , en la catedra de cirujia de la Facultad de Veterinaria de Madrid. Se le habia amputado una de las patas traseras para acto seguido volversela a ingertar, cuando yo le conoci, habian pasado dos años de la operacion y estuve tres en la facultad, el animal era un animal normal que solo cojeaba cuando corria (en ellos falla la rehabilitacion) pero cuando estaba estatico, o andaba despacio,no lo hacia, incluso le podias poner a dos patas que le sostenian sin fallos.
Se que a los 5 años de la intervencion se le sacrifico para estudiar el comportamiento de vasos y nervios y como se habian desarrollado las ramificaciones necesarias para que esa extremidad volviera a funcionar.
Gracias a el y a animales como el algunas personas pueden pisar con los dos pies, utilizar dos brazos, no una protesis mecanica.