domingo, 10 de agosto de 2025

La iluminación, ¿qué es eso?


Un  mendigo  había  estado  sentado  más  treinta  años  a  la  orilla  de  un camino.  Un día  pasó  por  allí  un  desconocido.  "Una  monedita",  murmuró  mecánicamente  el mendigo,  alargando  su  vieja  gorra  de  béisbol.  "No  tengo  nada  que  darle",  dijo  el desconocido.  Después  preguntó:  "Qué  es  eso  en  lo  que  está  sentado?"  "Nada", contestó  el  mendigo.  "Sólo  una  caja  vieja.  Me  he  sentado  en  ella  desde  que  tengo memoria".  "¿Alguna  vez  ha  mirado  lo  que  hay  dentro?",  preguntó  el  desconocido. "No" dijo el mendigo. "¿Para qué? No hay nada dentro". "Échele una ojeada", insistió el  desconocido.  El  mendigo  se  las  arregló  para  abrir  la  caja.  Con  asombro, incredulidad y alborozo, vio que la caja estaba llena de oro.

Yo soy el desconocido que no tiene nada que darle y que le dice que mire dentro. No dentro de una caja como en la parábola, sino en un lugar aún más cercano, dentro de usted mismo.

"¡Pero yo no soy un mendigo! ", le oigo decir.

Los que no han encontrado su verdadera riqueza, que es la alegría radiante del Ser y  la  profunda  e  inconmovible  paz  que  la  acompaña,  son  mendigos,  incluso  si  tienen mucha  riqueza  material.  Buscan  afuera  mendrugos  de  placer  o  de  realización  para lograr la aceptación, la seguridad o el amor, mientras llevan dentro un tesoro que no sólo  incluye  todas  esas  cosas  sino  que  es  infinitamente  mayor  que  todo  lo  que  el mundo pueda ofrecer.

La  palabra  iluminación  evoca  la  idea  de  un  logro  sobrehumano  y  el  ego  quiere conservar las cosas así, pero es simplemente el estado natural de sentir la unidad con el Ser. Es un estado de conexión con algo inconmensurable e indestructible, algo que, casi  paradójicamente,  es  esencialmente  usted  y  sin  embargo  es  mucho  más  grande que  usted.  Es  encontrar  su  verdadera  naturaleza  más  allá  del  nombre  y  de  la  forma. La incapacidad de sentir esta conexión da lugar a la ilusión de la separación, de usted mismo y del mundo que lo rodea. Entonces usted se percibe a sí mismo, consciente o inconscientemente, como un fragmento aislado. Surge el miedo y el conflicto interior y exterior se vuelve la norma.

 

EL PODER DEL AHORA. Eckhart Tolle