Calculo
que tendría 5 o menos años cuando visitando a mis abuelos me
quedaba en casa de un vecino de mi quinta, Salvadorín, que poseía
muchos juguetes. Parece ser que me gustó una balsa de Madelman
porque al salir me la guardé debajo del jersey y me la lleve a mi
casa. Gracias a ello mi madre me dio una de las grandes lecciones
de la vida: respetar la propiedad del otro y me hizo devolverla
después de una toma de conciencia correspondiente. Evidentemente mi
conciencia era escasa justamente por la inmadurez de mis pocos años
de vida.
Un
Vago Dos Vagos Tres Vagos
¿Existen
los vagos o los inconscientes? Si a un vago que no se mueve le dices
que hay fuego ¿corre? A veces hasta los paralíticos dejan de serlo
y se ponen a salvo.
En
uno de mis estados de facebook hará unas semanas decía que qué
culpa tenía un psicópata de serlo y las respuestas de algunas
personas fueron muy airadas. No tomaron conciencia de que como personas
tenemos una conciencia limitada, al igual que los niños que la
tienen aún mas limitadas, y eso nos condiciona la conducta.
Supongo
que tenemos la impresión falsa de que todos somos iguales, un hombre
un voto, pero claro la ventana por la que vemos el mundo puede ser
mas o menos ancha y eso condiciona nuestra idea de lo que sucede en
la vida.
Todos
recordamos cuando fuimos niños. En mi caso sabía que estaba mal
robarle su balsa a mi amigo (por eso la escondi debajo de mi jersey)
pero mi inconciencia impedía darme cuenta del daño que hacia a el a
mi y a mi familia, así como que no valía la pena. Inconsciente del
respeto al otro (tambien llamado amor al próximo).
Por
tanto el mal comportamiento del otro puede estar basado en mi
ignorancia del mundo interior del otro pero tambien en su falta de
conciencia de quien es. Si sabes quien eres igual que si sabes que
hay fuego no te puedes quedar quieto, te mueves!
¿Y
quienes somos? Somos uno, no dos. El otro es mi familia, su dolor o
felicidad tambien es la mia. Si se comporta mal probablemente sea
inconsciente, tal como yo lo fui, de lo que nos rodea, lo que nos
une, lo que nos hace una gran familia humana.
No
hablo de moral o moralina o de quedar bien sino de una realidad que
como las ondas de radio o tv existen pero no vemos si nuestros
aparatos aun no funcionan adecuadamente.
YO
SOY TU
Juan
Carlos Medina